Análisis de obra: Ciudad-Mujer-Ciudad

(1978), Pola Weiss

Por: Montserrat Romero Rodríguez

 
Still frame. Ciudad - Mujer - Ciudad (1978), Pola Weiss

Still frame. Ciudad - Mujer - Ciudad (1978), Pola Weiss

 Introducción:

Es importante destacar el papel de Pola Wiess dentro del nacimiento del videoarte en México. Egresada de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM en 1975 pronto entró en contacto con el trabajo del videoartista coreano Nam June Paik y la esposa de éste, Shigeko Kubota, mismos que influenciarían de manera determinante su trabajo y la acercarían  al movimiento artístico Fluxus bastante en boga en aquella época en Norteamérica y Europa.

Es justamente con Kubota con quien compartiría un enfoque feminizante de la creación artística, aunque evidentemente tendiendo más a un feminismo artístico que combativo como queda claro en la obra de la japonesa “Video is a victory of Vagina” (1976).  Ya en su papel de docente en la institución que la formó, crea la productora arTV donde produciría en 1978 la pieza que atañe el presente análisis: “Ciudad-Mujer-Ciudad” un  videotape de 18 minutos donde presenta una especie de paralelismo entre una mujer y una ciudad, en este caso, la Ciudad de México en las postrimerías de la década de los setentas. 

Análisis Denotativo:

De estructura secuencial el video alterna imágenes de estética psicodélica, aspas móviles de colores sólidos y saturados con acercamientos manuales de un amanecer rural acompañado de sonidos ambientales, de agua, aves y la risa de un niño, seguidamente la música nos lleva a la secuencia de una parada de autobús en una mañana citadina, durante las transiciones se puede observar la presentación progresiva del cuerpo de una mujer blanca desnuda mediante el efecto de chroma key, (la extracción de un color y remplazarlo por otra imagen, dando un efecto de transparencia) hasta que finalmente una voz (en off) femenina de acento capitalino habla sobre el agua y bajo ella entra una melodía de flauta, al tiempo que la mujer baila siguiendo al ritmo mientras se presentan distintas tomas de la capital mexicana: la Alameda, el Eje Central, el Zócalo, el Palacio de Bellas Artes entre otros, hasta ser sutilmente cubiertos por la figura femenina y las aspas de colores, el sonido de unas campanas corta la secuencia y la voz en off en tono alto habla del aire y la basura. El ritmo cambia hacia las percusiones y el baile de la mujer se acelera sobre tomas de avenidas, tráfico y gente, la voz aún más alta habla de la prisa y la opresividad del tiempo, hasta terminar en un clímax, con un grito y el encuadre de los genitales de la mujer. La música cambia hacia una tonada relajada, la mujer yace dormida sobre imágenes nocturnas de la ciudad. Las luces de los autos son interrumpidas por una música que imita los ritmos africanos y un zoom-out revela a la mujer cual si estuviera crucificada (a modo de las imágenes cristianas) sobre un fondo psicodélico, la figura se aleja hasta perderse. Finalmente aparecen los créditos y la música cambia por última vez.

 

Análisis Connotativo:

Sin bien no plantea un discurso ecologista como tal, si presenta una interesante comparación entre una ciudad destruida y sucia con una mujer sufrida y “adolida”, compara la pérdida del agua con sus llantos, el aire contaminado y sucio con su respiración seca. Destaca además el sentido de prisa y opresión que se vive en la ciudad, ritmo que impide vivir “todos corren como si estuvieran solos” así mismo  la exigencia del “ser” en medio de un todo que oprime, dando finalmente un sentido de martirio, de ahí la crucifixión que cierra la obra.  

Como se refirió antes la influencia de Kubota es clara, específicamente en el sentido de la instrumentalización de la cámara como herramienta del empoderamiento, e incluso como asegura Sepulveda (2015) se concibe a la producción artística como un acto evidentemente materno. Aunque no radicaliza en el asunto, Weiss presenta una imagen del cuerpo femenino un tanto discordante con el canon de su época, como bien ejemplifica el cuerpo de la actriz de esta pieza, Vivian Blackmore.

En lo técnico, destaca sin duda la labor de edición, sobre todo si se tiene en cuenta que muchos de los efectos y distorsiones se lograban simplemente variando los ajustes la cámara, a los cuales Weiss llamaba “vidEFECTOS”. En su estructura para Acha (1978) es una obra más acercada a lo cinematográfico pues tiene un inicio y un final bastante claro, por su parte Escobedo (2015) asegura que el video se construye sobre un molde diegético clásico (espacio, tiempo y personajes)         

Bibliografía:

  ESCOBEDO, Teolinda (2015) “Historiografía del Videoarte Mexicano a través de un Recorrido de Tres Décadas de Producción” Tesis Doctoral. México: Universidad de León.

TORRES Ramos, Edna (1997) “El Videoarte en México. El caso de Pola Weiss” Tesis de Licenciatura. México: UNAM  http://polaweiss.mx/biografia.html. Consultado 07 de octubre de 2018