Semana 244_2 Imagine you wake up and there is no Internet

Imagine you wake up and there is no Internet

con obra de !Mediengruppe Bitnik & Low Jack (DE/FR), Aram Bartholl (DE), Jono Boyle (UK), Heath Bunting & Kayle Brandon (UK), Vaggelis Deligiorgis (GR), Exonemo (JP), Marina Gioti (GR), Antonis Kalagkatsis (GR), George Moraitis (GR), No Más / No More (GR), Manos Saklas (GR), Molly Soda (U.S.), Superflux (UK), Technopolitics (AT), Alexandros Tzannis (GR), Filipe Vilas-Boas (PT)

Curaduría por Katerina Gkoutziouli & Voltnoi Brege

en Romantso, Anaxagora 3 – Atenas, Grecia

¿Qué pasaría si un día te despiertas y no hay internet?

Imagine you wake up and there is no Internet explora los efectos de la conectividad ubicua y la tecnología en la vida cotidiana. Partiendo de nuestra obsesión por las tecnologías digitales, la exposición busca potenciar el debate sobre la coexistencia del humano y la máquina en el siglo XXI.

13 artistas y 5 colectivos artísticos muestran escenarios del presente y del futuro próximo, estrategias de desconexión y desorientación, planes de evacuación y fuga de la ciudad, estudios sobre la sociedad de la información, instantáneas de la vida digital y de las infraestructuras que nos permiten estar conectados a la red, y nuevas lecturas para el período político que estamos atravesando. Cualquier sensación de certeza para el presente y el futuro parece haberse desestabilizado.

31 años después de la creación de la WWW, conceptos como espacio, tiempo, valor y trabajo han adquirido un nuevo significado. Y estos conceptos continuarán adquiriendo nuevos significados ya que la tecnología que más utilizamos, cambia a gran velocidad dejándonos -a menudo- en la posición de lx observadorx con poco espacio para maniobrar. Los niveles de control y vigilancia en las redes por las que navegamos, ya sean resultado de decisiones políticas o de tendencias de mercado, son a menudo oscuros. Al mismo tiempo, la vida cotidiana y los datos personales han adquirido un valor económico particular dentro de las redes y nuestra obsesión por la conectividad constante, sólo puede acelerar un futuro tecnológico en el que el comportamiento humano sea predecible o pueda predecirse para satisfacer las tendencias políticas y/o económicas.

Las obras de la exposición ponen de relieve momentos y fragmentos de nuestra vida digital que afloran cuestiones relacionadas con la relación humano-máquina y su impacto en la esfera pública. La exposición tiene como objetivo contribuir al debate sobre la dinámica en constante aceleración de la red, nuestra posición dentro de ella y, por último, los límites entre un mundo tecnológico impulsado por el humano y otro impulsado por la máquina.