Semana 295_1 Software for Less
Software for Less
con obra de Ben Grosser
en arebyte gallery
Software for Less lleva a lxs visitantes a un viaje a través de una exposición pseudotecnológica. Cada obra se presenta como un producto que podría haber salido de un Silicon Valley alternativo, interrogando y reimaginando cómo se crea, opera y vende el software. La exposición invita al espectadorx a reflexionar sobre la influencia que el software ejerce sobre nosotrxs, haciendo énfasis en las plataformas de las redes sociales como principal impulso; ¿cómo está cambiando nuestra concepción de la amistad una interfaz que pone en primer plano nuestro conteo de amigxs? ¿Quién se beneficia cuando un sistema de software puede intuir cómo nos sentimos? En definitiva, cuestionar cómo el software moldea lo que somos.
La obra de Grosser modifica y reescribe las reglas de las plataformas de las redes sociales para presentar al espectadorx formas nuevas y radicalmente diferentes de interactuar en este espacio. La muestra examina los espacios fijos de consumo e interacción prescritos por la gran tecnología, además de presentar formas alternativas de experimentarlos que no se guían por los principios del crecimiento y el capitalismo.
Utilizando métodos personalizados como la recomposición del software, técnicas como la ofuscación de datos y géneros que incluyen los supercortes de video y net art, Software For Less presenta aplicaciones funcionales y obras de arte digitales que producen menos beneficios, menos datos y menos usuarixs. En el centro de la exposición se encuentra una nueva plataforma llamada Minus, una red social en la que lxs usuarixs sólo tienen 100 publicaciones de por vida. En lugar de los feeds algorítmicos, los recuentos visibles de "me gusta" y los scrolls infinitos empleados por las grandes empresas tecnológicas para inducir un compromiso interminable de lxs usuarixs, Minus limita la cantidad de publicaciones en el feed, y pone en primer plano -como única métrica visible y decreciente- las pocas oportunidades que les quedan. No es un software para más, sino un software para menos.
Para esta exposición se comisionaron cuatro nuevas piezas Sweet Talk Platform, Minus, Get Less y DEFICIT OF LESS, que dialogan con Get More y ORDER OF MAGNITUDE.
La exposición además presenta Get More, ORDER OF MAGNITUDE, Safebook, Not For You, Twitter Demetricator, The Endless Doomscroller y Tokenize This. También se incluyen Go Rando y Facebook Demetricator, la primera recientemente reescrita para la inauguración de la exposición y la segunda programada para ser reescrita durante su recorrido a través de una serie de sesiones de código en vivo.
Los últimos veinte años se han caracterizado por el auge del software. El software ha hecho posible la web, ha dado vida al smartphone y ha hecho posible, en palabras de un gran director general de tecnología, un mundo "más abierto y conectado". Sin embargo, el software, que ahora utilizan miles de millones de personas en todo el planeta cada día, lleva incrustadas las ideologías capitalistas de quienes lo crean.
Procedente de la cultura empresarial obsesionada con el crecimiento de Silicon Valley en Estados Unidos, el software actual quiere lo que sus creadores quieren: más. Este deseo es fundamental, ya que impulsa el funcionamiento del software, lo que hace y lo que hace (im)posible. El resultado es una población global que ahora depende de plataformas de software que activan intencionadamente en lxs usuarixs un "deseo de más", una necesidad que el software satisface con sus recuentos de "me gusta" y feeds algorítmicos y notificaciones interminables, todo ello al servicio de lo que la gran tecnología más busca para realizar sus esperanzas y sueños: más usuarixs, más datos y más beneficios. Y aunque la riqueza y la fama han llegado a quienes crean las plataformas, su implacable enfoque en el crecimiento y la escala ha dejado un rastro de destrucción en la sociedad. La salud mental, la privacidad y la democracia han disminuido, mientras que el autoritarismo, el racismo y la desinformación se han envalentonado. Veinte años después del auge del software, el afán de superación de las grandes empresas tecnológicas ha transformado su baza más alabada en su mayor lastre.
Tras años de esfuerzos artísticos para definir, examinar, revelar y desactivar cómo el software activa el deseo de más -para "demetrificar" las redes sociales, desactivar la vigilancia emocional, confundir los algoritmos de los grandes datos y rastrear cómo la política de la interfaz se convierte en la política de la humanidad- esta exposición presenta los primeros resultados de un nuevo experimento, que pretende generar un software para menos.
¿Cómo se sentirían lxs usuarixs si las plataformas de software trabajaran activamente para reducir el compromiso en lugar de producirlo? ¿Y si las interfaces de los programas informáticos fomentaran concepciones del tiempo lentas en lugar de rápidas? ¿Por qué el software no puede querer menos en lugar de más? Utilizando métodos personalizados como la recomposición del software, técnicas como la ofuscación de datos, y géneros que incluyen supercortes de vídeo y net art, Software for Less presenta aplicaciones funcionales y obras de arte basadas en los medios de comunicación que abordan estas cuestiones, presentando obras que producen menos beneficios, menos datos y menos usuarios.
Incluye una red social que pretende limitar la compulsión a usarla, sistemas que hacen que los alimentos impulsados por la inteligencia artificial sean menos atractivos para quienes los perfilan, y los artefactos de las investigaciones que revelan cómo unos pocos manipulan a un amplio público en un hiperestado de más, y cómo la interrupción de esa manipulación podría señalar el camino hacia un futuro alternativo. No se trata de software para más, sino de software para menos.
Ben Grosser crea experiencias interactivas, máquinas y sistemas que examinan los efectos culturales, sociales y políticos del software. Sus exposiciones más recientes incluyen el Barbican Centre de Londres, el Museum Kesselhaus de Berlín, el Museu das Comunicações de Lisboa y la Galerie Charlot de París. Sus obras han aparecido en The New Yorker, Wired, The Atlantic, The Guardian, The Washington Post, El País, Libération, Süddeutsche Zeitung y Der Spiegel. El Chicago Tribune lo calificó de "rey inigualable del galimatías ominoso". Slate se refirió a su trabajo como "desobediencia civil creativa en la era digital". Las obras de Grosser se citan habitualmente en libros que investigan los efectos culturales de la tecnología, como The Age of Surveillance Capitalism, The Metainterface, Critical Code Studies y Technologies of Vision, así como en volúmenes centrados en prácticas artísticas computacionales como Electronic Literature, The New Aesthetic and Art y Digital Art. Grosser es profesor asociado en la Escuela de Arte y Diseño, y cofundador del Laboratorio de Estudios Críticos de Tecnología en el Centro Nacional de Aplicaciones de Supercomputación, ambos en la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign, Estados Unidos.